Jorge Negrete la consolidación más representativa de nuestro flolclor:“Idolo del público latinoamericano”

  • Jimena Ladu

 

negrete
Jorge Negret

El éxito taquillero y el reconocimiento internacional de la película Allá en el rancho grande (1936), interpretada por Tito Guízar y dirigida por Fernando de Fuentes, hace prosperar un nuevo género cinematográfico, la comedia ranchera, cuyas convenciones nacionalistas lo hacen genuinamente nacional.

Tito Guízar, es considerado el primer charro mexicano, sin embargo pronto fue superado por Jorge Negrete, quien con su gallarda figura y su potente voz logra apropiarse del distintivo de “El charro cantor” y consolida un arquetipo del cine mexicano, boceteado por Guízar, pero de proyección internacional con Negrete.

Sin duda Jorge Negrete es pieza clave para el desarrollo de este género cinematográfico. La aceptación de nuestro orígenes depositados en un personaje virtuoso y la unificación de un símbolo nacional, resultado de un mestizaje (sino de rasgos físicos, pues Negrete es evidentemente un criollo, lo es en sus canciones populares y los trajes de charro), su amor propio, su seguridad, valentía, rebeldía y su naturaleza contradictoria hacen del personaje de Negrete un héroe mexicano de la pantalla, con gran impacto en Iberoamérica.

Su presencia y voz quedan consagradas en el cine mexicano con el triunfo de la película ¡Ay Jalisco no te rajes! (1941) de Joselito Rodríguez, a partir de esta película delimita su estilo como charro cantor (mujeriego, parrandero, macho, bohemio, borracho, enamorado, valiente, cantador y jugador) logrando diferenciarse de los otros, por la dignidad con la que porta el traje de chinaco o de charro y la capacidad de su voz para elevar la canción popular mexicana a otro rango musical. La educación de su voz, en la técnica de canto de ópera logra un cambio en la interpretación de la música ranchera mexicana, dándola a conocer por todo el mundo, convirtiéndolo “en el cantante más popular de América Latina”.

La música ranchera mexicana se populariza con su voz y con el ingenio y talento de sus compositores, el dúo Manuel Esperón (música) y Emilio Cortázar (letra) y José Alfredo Jiménez, que sin ellos la conjunción del arquetipo de “El charro cantor” no hubiera estado completa. Lleva la canción y las tradiciones mexicanas por toda Latinoamérica y  España. Quizá en esto lugares es un ídolo sin precedentes, que causa furor entre sus fans propiciando concentraciones en masa. Por eso es ante todo un ídolo popular.  Esta popularidad es consecuencia de su gran voz y su capacidad de interpretación.

Se considera un símbolo de lo mexicano, pues en sus películas se plasma las expresiones del folclor de México “una imagen rural de nuestro pueblo” engalanada con su dignidad “…elevó la figura del charro cantor a rango de institución. No sólo fue profeta en su tierra: difundió una imagen de lo mexicano que hasta la fecha nadie ha podido borrar”.

Jorge Negrete no es sólo una figura popular en el cine mexicano.
Jorge Negrete nace en Guanajuato el 30 de noviembre de 1911 y por convicción y no por accidente es militar, cantante, actor y sindicalista. Mucho se especula sobre su carácter despótico y la creencia de superioridad moral que posee sobre los demás, pero lo que si es cierto es que es un de los ídolos mexicanos, más recordado de la época de oro de nuestro cine.

La carrera de Jorge Negrete no se limita a las 43 películas interpretadas y al sin número de temas cantados en sus películas y en sus conciertos, no es preciso hablar de él sin hablar de la Asociación Nacional de Actores (ANDA) y del legado que deja con su participación en este sindicato.

Jorge Negrete se convierte en un luchador social incansable a favor de los derechos del gremio actoral y de los miembros más desprotegidos (los extras, los coristas y actores carperos). Logra ser uno de sus fundadores y líder más importante del ANDA. Sin importar que su carrera de actor se afectara, al entrar en conflicto con los productores de cine, por defender los intereses de los actores y del sindicato.

Por su legado en el cine, en la música vernácula, su lucha sindical y el poder de divulgación que logra a nivel internacional y nacional de nuestra cultura, es un honor recordar su trabajo en la industria cinematográfica en México.

1 Enrique Serna , Jorge El bueno, México, Editorial Clío, 1993, p.7.
2 Julio Etienne (1990, 11 de diciembre). Jorge Negrete fue en la pantalla un patriarca sin sofisticación: J.Etienne. El día.
3 Enrique Serna (1995, 3 de enero). Jorge Negrete, imagen de lo mexicano que nadie ha borrado. La jornada.

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